Que las energías renovables son una alternativa maravillosa frente a los combustibles fósiles ya es un hecho, lo que ocurre es que como pasa en todos los grandes avances, no dejan de aparecer mitos sobre el sector, así que hoy vamos a ver cuáles son los mitos más extendidos por el sector de las energías renovables.
Los mitos más extendidos sobre el sector de las energías renovables apuntan a los precios, pues las tachan de más caras; a la eficiencia, pues dicen ser mucho menos eficientes; o al riesgo ambiental. A continuación lo expondremos de una manera más detallada.
Con el paso de los años, el sector de las energías renovables ha reducido su precio de una manera muy importante, de hecho en la actualidad son la opción más económica para muchos lugares de la geografía de nuestro país. Además hay que tener en cuenta que poseen muchas más ventajas económicas respecto a la durabilidad que ofrecen, y además tampoco requieren de un gran mantenimiento.
Son muchas las personas que piensan que el sector de las energías renovables es incapaz de suministrar la energía que se necesita, sin embargo hay muchos países que ya confían en este sector, como por ejemplo Alemania. Este país no deja de apostar por la obtención de electricidad a partir de energías renovables.
Otro mito que está muy extendido es que las energías renovables son contaminantes, esto es totalmente falso, no hay ninguna duda de que las energías renovables no son contaminantes. Vale que el impacto ambiental cero es muy difícil de conseguir, pero desde luego las energías renovables son una alternativa mucho mejor para el planeta.
Los combustibles fósiles sí que son de lo más contaminantes para el medio ambiente, aunque las energías renovables no sean perfectas en la actualidad, sí que son ya una alternativa mucho mejor. El sector de las energías renovables es un sector que no deja de avanzar, de hecho se espera que para el año 2050 pueda cubrir las necesidades energéticas de todo el mundo, así que es muy importante fomentar su uso.
Durante el pasado año 2015 España, como muchos otros miembros de la UE, se comprometió a cumplir el Acuerdo de París, que no es otra cosa que unos objetivos climáticos establecidos. Para que esto sea posible, nuestro país tiene que hacer numerosos cambios, entre los que destacan principalmente el uso de las energías renovables y la mejora de la eficiencia energética en los edificios.
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